Un espacio para caminar con Jesús
Interioridad
Jueves 29 de febrero de 2024
Por: H. Elena Azofra
Lázaro estaba echado en su portal
Para este momento de interioridad inicia respirando con lentitud, serena el corazón y lee:
«En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos:
Había un hombre rico que se vestía de púrpura y de lino y banqueteaba cada día.
Y un mendigo llamado Lázaro estaba echado en su portal, cubierto de llagas, y con ganas de saciarse de lo que caía de la mesa del rico…».
Esta escena que describe Jesús sigue siendo actual. Unos muy ricos y otros muy pobres, como si no quisiéramos entender que todos somos hijos del mismo Padre Dios y que los abundantes bienes de los que tienen y aun ansían tener más, lo que provoca, es que los que tienen poco, vayan teniendo cada vez menos.
Es un problema social, ecológico, político, ético… que podría disminuir haciendo caso a Jesús que invita a la toma de conciencia del deber solidario, de la caridad fraterna.
Es una clave de conversión cuaresmal, no solo ser conscientes de los pobres que viven cerca, sino también colaborar al bienestar de todos, aceptando repartir los bienes.
La limosna, la caridad, la solidaridad, la aportación generosa, la dádiva sin esperar nada a cambio, el compartir los bienes, incluso renunciar a beneficios en favor de los que tienen menos, o poco o nada. QUÉ BUENA DECISION CUARESMAL.
Qué bello sería un mundo sin pobres y sin mendicidad. Qué bello será el cielo donde cada quien compartirá el amor de Dios, sin cantidades que marquen diferencias.
Después de un momento de silencio reflexivo, decide a quién vas a ayudar o qué puedes compartir de lo tuyo.
Señor Jesús, que no sea indiferente ante el sufrimiento de mi prójimo, antes bien, dame generosidad valiente. Amén.
Con Tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.
