El gobierno de Alemania decidió este martes 5 de enero extender hasta el 31 de ese mes las restricciones a la vida cotidiana, entre ellas el cierre de colegios y comercios no esenciales, en la lucha por contener el avance del Coronavirus.
Asimismo, se endurecerán otras medidas, como la limitación de las reuniones privadas, que a partir de ahora solo podrán incluir a una persona que no viva en el domicilio.
El nuevo paquete de medidas fue acordado por la canciller Angela Merkel y los jefes de los 16 estados federados del país, y va un paso más allá en las limitaciones de movimientos, pues las restricciones adoptadas hasta la fecha no han conseguido frenar el incremento de los casos.
Alemania, que pudo controlar con éxito la primera ola, ha visto estresado su sistema de salud con una segunda ola que ha aumentado dramáticamente también el número de fallecidos.
Las guarderías o jardines infantiles seguirán abiertos solo para recibir a los hijos de personal esencial, y se recomienda a los padres no llevar a los niños a estos recintos a no ser que sea estrictamente necesario.
En ese sentido, las restricciones de viajes serán más estrictas, especialmente para personas que regresen a Alemania desde países considerados «de riesgo” por la alta incidencia del coronavirus. Valga señalar que Alemania considera «zona de riesgo” a casi 150 países.
Con información de Deutsche Welle.