El cantante mexicano Emmanuel lo hizo otra vez: cumplió con un recital lleno de nostalgia, euforia y frenesí con sus éxitos.
La cita musical inició a las 8:20 pm con la artista venezolana Alicia Banquez, quien interpretó tres temas, entre esos, “Desesperada” de Marta Sánchez, cuya canción fue coreada a todo pulmón por todos en la sala Ríos Reyna del Complejo Cultural Teatro Teresa Carreño.
A las 8:45 pm encendieron las luces y dieron 15 minutos de receso. A las 9:03 pm nuevamente apagaron los focos, se abrió el telón e iniciaron los acordes de “Corazón de melao”. El delirio comenzó a las 9:06 pm con la aparición de Emmanuel, quien bajó con un traje platinado por una rampa instalada en el medio del escenario.
El turno continuó con «No te puedes ir», «Sigue lloviendo afuera», «Pobre diablo», «Bella señora», «Quiero dormir cansado», «Detenedla ya».
No obstante, cuando interpretó «Pobre diablo», un solo coro se apoderó de la sala. Era como si la letra le había vivido cada uno de los que estaban presentes.
Emmanuel emocionado ante su público
“Es la primera vez que verdaderamente me he emocionado en un escenario”, expresó el cantante que en todo momento fue ovacionado de pie y que además de mantener su voz, también permanecen sus típicos movimientos de escena con brincos y patada al frente.
Posteriormente, Emmanuel recordó al coronavirus. “Hace dos años se nos atravesó el bicho que nos puso una máscara. Hoy ya nos podemos ver las caras y hablar en algunos lugares”, expresó.
Además, agregó que piensa que todos “tenemos que volver abrir el corazón y no cerrarle las puertas a Dios porque no hay manera de ser feliz sin él. Hay que orar en casa, hay que orar con nuestros hijos. Este mundo cada día está más loco y todavía pasan cosas más ilógicas”, dijo.
“Tengo mucho que aprender de ti”, «Sentirme vivo» y “Es mi mujer”, le siguieron un poco antes de que el reloj marcara las 10:05 pm. Así transcurrió la primera hora de concierto y llegó el primer cambio de ropa.
Seguidamente llegaron “Arrimar el alma”, “Ahora me voy”, “El día que puedas”, “Todo se derrumbó”, “Insoportablemente bella”, “Este terco corazón” y “Tú y yo”. Las mujeres deliraron con cada movimiento del mexicano en escena. No faltaron los “¡Te amo!” a todo pulmón.
Adicionalmente, una de las fanáticas se subió al escenario y logró besar a Emmanuel y pese a que un encargado de seguridad se acercó –sin agresión- a bajarla, el artista correspondió no solo al beso, sino que también la abrazó. Su rostro fue de absoluta complacencia cuando le tocó bajarse. ¡Representó a todas las mujeres!
Un segundo cambio de ropa lo mostró con un saco estampado, pantalón y camisa negra para darle paso a “No he podido verte”, entre otros temas.
La noche no terminaba ahí. Con un nuevo y último cambio de vestuario, esta vez de rojo, Emmanuel puso nuevamente a todos de pie con “Chica de humo”, “La última luna” y cerró con el tema no menos exitoso y que le da el título a su gira: “Toda la vida”.
A las 10:55 pm se despidió y desapareció por la rampa, mientras que a la par sus músicos tocaban y bailaban.
