Oración de la mañana. Domingo 16 de agosto de 2020.
Por Edgar Magallanes, SJ.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Entro en la presencia de Dios Amor.
Te pido Señor: que yo quiera lo que quieres tú, que yo haga lo que haces tú y lo haga a tu modo.
Una mujer cananea pide a Jesús que sane a su hija. Él dice que el pan es para los hijos y no para los perros y ella responde que los perros comen de las sobras de sus dueños.
Reflexiono:
Muchos deseos compiten por ser los dueños de mi vida y la fe es la que otorga ese lugar. Sólo si reconozco a Jesús como el absoluto de mi vida, viviré en plenitud y seré realmente libre.
Me pregunto:
¿Se nota la calidad de mi fe en todas las cosas que hago y en cómo las hago?
¿Dejo atrás mis deseos de reconocimiento, de encajar o dominar por seguir a Jesús?
Le agradezco a Jesús el encuentro, le encomiendo el día y rezo por la salud del mundo.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Con tu presencia Señor, saldremos fortalecidos.