Tras las fuertes precipitaciones caídas el pasado 7 de junio de este año en el municipio Tovar del estado Mérida, un estudiante de Fe y Alegría se quedó sin poder habitar su vivienda.
El derrumbe de un barranco invadió el hogar de Héctor Contreras, estudiante de primer año de la Unidad Educativa Hermana Felisa Elustondo, perteneciente a Fe y Alegría de Tovar.
Pero lo que sufrió el joven junto a su familia solo es consecuencia de lo que dejó la tragedia de hace un año. Ese día, 23 de agosto, su vivienda quedó seriamente afectada, que también estaba amenazada por un barranco que estaba a punto de caerse.
Yetsi Paola Contreras, madre del estudiante, relató que el día de la tormenta, ella estaba con su hijo menor cuando se desprendió el barranco. «Se empezó a meter el lodo a la casa, fue un momento de mucho susto, tuve que salir corriendo con mi hijo».
Contreras dijo que su hijo mayor, Héctor, en ese momento estaba en clases.
Luego de haber pasado el temporal, volvió y encontró su casa totalmente inundada de barro. «Fue un momento de mucho dolor, a pesar de que era un ranchito, era nuestra casa».
Ante esta tragedia la madre del estudiante de Fe y Alegría reveló que los vecinos de la comunidad habilitaron un local del sector donde ya tienen 2 meses viviendo.
«Estamos esperando respuesta del gobierno, a ver si nos ayuda», dijo Contreras. Sin embargo, acotó que han recibido visitas por parte de funcionarios de Protección Civil para monitorear el sector.
También señaló que un ingeniero fue a inspeccionar la zona donde vivían y les dijo que «allí ya no se puede construir» ya que es de alto riesgo.
Falta de recursos
Motivado a esta situación, Contreras expresó su preocupación porque las mismas organizaciones les dijeron que la asignación de viviendas es un proceso que está demorado
Esto debido a que hay muchos damnificados en Tovar esperando por el beneficio. La afectada señaló que el proceso sería más fácil solo si contaban con un terreno donde podían parar la construcción.
«De hecho, tenemos un terreno que nos dio mi suegra», contó la señora. Pero la situación económica que atraviesa la familia no les permite acondicionar la parcela para la vivienda. «La cosa no es fácil». puntualizó.
«El marido mío lo que gana es para medio comer» por ello, la madre del estudiante hizo un llamado a Yvan Puliti, alcalde de Tovar, para que los ayude ya que «no cuento con los recursos para tener una casita».
Mano Amiga por Fe y Alegría
De igual manera, Yetsi Paola Contreras, madre del estudiante de Fe y Alegría, manifestó su agradecimiento con todas las profesoras que le tendieron la mano durante ese momento de angustia.
Por su parte, el chamo Héctor dijo que «las profesoras han sido muy buenas con nosotros, nos han apoyado».
Y a pesar de haber vivido momentos difíciles durante los aguaceros en Tovar, el estudiante de Fe y Alegría apostó por la educación y recomendó a sus compañeros que «aprendan lo que puedan y estudien» para tener más oportunidades en la vida.
Por Héctor Cortez y Zachari Roa/Radio Fe y Alegría Noticias