La invasión de Rusia a Ucrania llegó a su primer mes, hace dos días. Por más de un lo que ha quedado es una larga estela de muerte y destrucción. Hay quienes aseguran que se trata de la peor crisis humanitaria después de la segunda guerra mundial.
Y la pregunta es, tal vez obvia pero quizás sin respuestas: ¿estamos lejos del fin? Y es que, tras varios intentos de organismos internacionales, líderes de países del mundo y hasta de la iglesia católica, que han intermediado, no se ve una salida clara a esta situación que marca un antes y un después de aquel 24 de febrero de 2022 cuando se detonó la primera bomba.
Balance
Se reportan más de 1000 muertos y más de 3 millones 600 mil personas han tenido que salir del país buscando refugio en otras latitudes, según las estadísticas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Se deben sumar los más de 6,5 millones de personas que se han tenido que desplazar dentro de Ucrania. El ACNUR calcula que más de 10 millones de ucranianos , una cuarta parte de la población, ha abandonado sus casas en estos últimos 32 días.
Las estadísticas revelan que alrededor de un 90 % de los refugiados son mujeres, niños y personas mayores. Así lo indica el Alto Comisionado para las Naciones Unidas para los Refugiados, en su último informe este 22 de marzo.
Las cuentas revelan que más de 1000 civiles han muerto y otros 1.557 han resultado heridos desde que Rusia arremetió contra el pueblo ucraniano.
En números
Ataques con bombas
548 instituciones educativas
62 instalaciones de atención médica
Miles de edificios y casas destruidas
Economía y sanciones
Desde el punto de vista económico, una de las consecuencias de la invasión a Ucrania por parte de Rusia, es el alza de los precios del trigo, y materias prima como petróleo, aluminio, níquel, gas, carbón y oro.
Por otra parte, también se han visto afectados los productores agropecuarios, quienes se han quedado sin uno de sus más importantes proveedores de fertilizantes.
Varios gobiernos del mundo decidieron aplicar sanciones económicas a Rusia a manera de presión para que cese en su afán de destrucción.
También varias organizaciones deportivas internacionales han decidido excluir a Rusia de competencias de talla mundial, incluida el mundial de fútbol.
Peticiones y exigencias
El papa Francisco alzó la voz e hizo un llamado desde El Vaticano a la comunidad internacional para que haya compromisos que permitan poner fin a una guerra que calificó de «repugnante” y de «masacre insensata”, tras rezar el ángelus en la Plaza de San Pedro ante unos 30 mil fieles el domingo 20 de marzo.
Este jueves 24 de marzo cuando se cumplió un mes del conflicto, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, durante su intervención en la sesión extraordinaria de la OTAN, pidió al grupo de mandatarios «ayuda militar ilimitada», y que entregue a los ucranianos aviones y tanques porque «es cuestión de vida o muerte».
